Consecuencias de una victoria

Inglaterra derrotó a Ecuador y clasificó a cuartos de final, pero luego del partido el resultado era lo último de lo que se hablaba. La "indisposición" sufrida por David Beckham y el desagradable espectáculo cuando no le quedó más remedio que devolver sobre el césped tras marcar un fabuloso gol a Ecuador, trae cola.

El mediocampista se retiró del campo de juego blanco como una pared y muy sudoroso y los médicos han tomado cartas en el asunto según publica un diario británico.

En efecto, podemos decir que se acabaron las cervezas, ni un vasito de vino o champán; mucha agua, mucho té... y a correr. El alcohol, ni en pintura.

El plantel inglés espera que Beckham vuelva a estar al cien por cien para el partido que el viernes les enfrentará con una mermada selección de Portugal, machacada a base de tarjetas por el árbitro ruso Ivanov.

"Debemos aclarar que David no está enfermo, lo que pasa es que se quedó deshidratado, eso les pasa hasta a los mejores atletas", anunció un portavoz de la selección inglesa, Adrian Bevington.

Es interesante anotar que el lunes fue el día del 52 cumpleaños de su madre Sandra, y Beckham brindó con agua.